[vc_single_image image=”9952″ image_size=”full” frame=”noframe” lightbox=”yes” link_target=”_self” width=”1/1″ el_position=”first last”] [vc_column_text pb_margin_bottom=”no” pb_border_bottom=”no” width=”1/1″ el_position=”first last”]
Únicamente, como de triunfo indiscutible cabe calificar el desarrollo de la segunda edición del Universal Music Festival de 2016. Ya totalmente consolidado como el encuentro musical de referencia del verano madrileño, el Festival ha roto todos las previsiones y récords hasta la fecha: ‘sold outs’ de localidades en todas y cada una de las noches, más de 10.000 asistentes y muchos de ellos las más altas celebridades de la escena social, política y cultural española.
No podía haberse encontrado mejor modo de contribuir a la celebración del segundo centenario del Teatro Real. No en vano sobre sus egregias tablas ha podido disfrutarse en cada una de las veladas de conciertos únicos e irrepetibles de, simplemente, lo mejor de los estilos musicales escogidos.
Abría por todo lo alto esta edición el rock glamouroso e internacional de una leyenda viva de la música y “padrino” este año del Universal Music Festival, Rod Stewart, con un concierto a todas luces inigualable al que asistieron Sus Majestades los Reyes de España. La segunda noche pudimos disfrutar en toda su plenitud del talento en escena de uno de los autores más prolíficos y exitosos en la escena española de los últimos 40 años y maestro de la mejor canción en castellano de siempre: José Luis Perales. La tercera fue para festejar por todo lo alto los éxitos del songwriter internacional con más prestigio en el mundo entero, Rufus Wainwright, quien ofreció, a solas con su piano y guitarra, un delicioso paseo por toda su discografía.
También el mejor rock viajero con sello español gozó de su espacio privilegiado en el Festival con la inmensa y espectacular actuación del aragonés Bunbury, todo un coloso en escena. El jazz más selecto y elevado estuvo representado merced a la participación de toda una estrella rutilante del género: la inconmensurable Diana Krall, quien dió toda una lección magistral de estilo. El pop nacional de mayor altura y proyección celebró un impresionante concierto, el que ofreció un cantante y compositor en evidente estado de gracia: Manuel Carrasco. Finalmente y como broche de oro, el mejor flamenco reinó en el escenario del Teatro Real con una propuesta insólita hasta la fecha: la de la reconversión de este espacio escénico en un tablao a la antigua usanza para deleitarse, sin amplificación alguna y en la distancia corta con el público, con el más puro flamenco a cargo de una primerísima figura: el cantaor Arcángel.
Con la satisfacción del deber cumplido y logrados todos los objetivos planteados, la organización del Universal Music Festival se dispone ya a abordar la tercera edición, que esperamos y deseamos que sea aún mejor, más grande y todavía más celebrada por el público musical de la capital de España.
[/vc_column_text]